jueves, 4 de octubre de 2007

QUE NO HAYA SOL

Ayer era verano hoy ya no. Llovió toda la mañana y borró tu dibujo. Me costó ver a través de la espesa manta tu cuerpo por eso tuve que tocar y descubrir a través del tacto que otro cuerpo estaba a mi lado.

Hoy llovió todo el día. Mi cielo era gris. Estoy en el centro del huracán y todo a mi alrededor cambia. Y la vida puede cambiar mientras parpadeas. Ya se encargarán las gotas de cielo de limpiar los restos de pasado. Podría ser todo brillante pero no existe tanta luz.

Ha dejado de llover, el agua corre por la calle, y tu te vas detrás, arrastrándote, anegándote, inundándote. Ya no volveré a llamarte jamas, no rezaré para que vuelvas. Los días son torbellinos en mis manos, no hace falta que te explique que todo ha terminado.

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